Es triste empezar textos con malas noticias –para eso están los periódicos-, sin embargo, debo comenzar dándote algunos datos que pueden desanimarte un poco o, por el contrario, motivarte a invertir tiempo y esfuerzo en un diseño web exitoso.
De acuerdo con Hubspot:
El diseño web se refiere a la combinación de elementos visuales que se utilizan para diseñar y desarrollar sitios web. En otras palabras, todo lo que se necesita para que tu página tenga un aspecto atractivo, sea fácil de usar y que cumpla con los objetivos de la empresa.
Los estándares de diseño web son el conjunto de reglas y prácticas recomendadas que los diseñadores utilizan para crear sitios efectivos y visualmente atractivos, con el fin de que los visitantes tengan una experiencia positiva y se logren los objetivos de la empresa.
A continuación, profundizaremos en los cuatro más importantes:
Esto es la estética general del sitio web, incluyendo la elección de colores, tipografías y gráficos, y la forma en que se combinan y presentan. La consistencia en el diseño hace que la página se vea organizada y profesional, mejorando la experiencia del usuario y aumentando tu credibilidad.
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La organización y jerarquía de la información sirve para definir secciones fáciles de entender, asegurando que cada una tenga un propósito claro y específico. Esto permite a los usuarios navegar por el sitio web sin sentirse abrumados.
También es importante considerar cómo se presenta la información para que sea legible y comprensible. Por ejemplo, el uso adecuado de la tipografía en los títulos o subtítulos puede mejorar en gran medida la estética del sitio web y hacer que sea más fácil de leer.
Se trata de permitir a los usuarios encontrar la información que necesitan de manera rápida y sencilla, con enlaces claramente etiquetados y organizados lógicamente. Trazar un mapa de sitio es indispensable en este punto. ¡Nada más feo que sentirse perdido!, ¿no crees?
Además, la inclusión de un botón de búsqueda, un menú de navegación secundario, sliders y FAQs (preguntas frecuentes), también puede hacer sus búsquedas más eficientes.
Tus objetivos pueden variar, desde la creación de un sitio web informativo hasta la generación de ventas y conversiones. En cualquier caso, el diseño debe apoyar y mejorar la estrategia comercial de la empresa.
Por ejemplo, si la meta principal es generar ventas y conversiones, debe diseñarse de tal manera que incite a los visitantes a comprar o a tomar medidas específicas con llamados a la acción (CTAs) claramente etiquetados, una presentación puntual de los argumentos de venta y testimonios.
Un buen diseño web no solo se centra en la estética visual, sino también en la usabilidad y la capacidad de convertir a los clientes potenciales en clientes. En ese sentido, el contenido relevante, interactivo y optimizado para los motores de búsqueda es crucial porque, si no apareces en los resultados, no lograrás atraer visitas.
Estos son los elementos que debes tomar en cuenta para que tu diseño web contribuya a tu estrategia SEO (Search Engine Optimization) y mejore la experiencia de los usuarios:
Las tipografías deben ser claras, de tamaño adecuado y tener un contraste suficiente con el fondo para que el contenido sea legible. Además, es importante utilizar fuentes web seguras y compatibles con diferentes dispositivos y navegadores.
Los colores pueden evocar emociones y transmitir mensajes a los visitantes. Es importante seleccionar una paleta de colores alineada con la identidad visual de tu marca, además de considerar aspectos como el contraste y la accesibilidad, asegurando que no dificulten la lectura o la navegación.
Para maximizar el éxito de un sitio web, es necesario guiar a los visitantes hacia la conversión. Para ello puedes utilizar varios elementos como:
El uso adecuado de etiquetas en los encabezados le da estructura y legibilidad a tu sitio. En términos de código, dichas etiquetas H1, H2, H3, ayudan a los motores de búsqueda a comprender la relevancia del contenido, resaltando las palabras clave principales y agregando jerarquía a la información.
Los enlaces internos ayudan a los visitantes a navegar dentro de tu web por más tiempo, de manera más fácil y eficiente. Los enlaces externos, por otro lado, pueden mejorar la credibilidad y autoridad al vincularse con fuentes confiables y relevantes de la industria.
Estos elementos visuales pueden mejorar la estética, captar la atención del usuario y transmitir mensajes de manera efectiva. Sin embargo, es importante optimizarlos para garantizar una velocidad de carga rápida y una experiencia de usuario fluida.
Este elemento es crucial, tanto para la experiencia del usuario como para el SEO. Los visitantes esperan que las páginas se carguen rápidamente para navegar y los motores de búsqueda tienen en cuenta la velocidad de carga al clasificar los resultados de búsqueda.
Se deben optimizar varios aspectos, como el tamaño de las imágenes, el código del sitio y el alojamiento, para asegurar una velocidad de carga óptima.
El uso del protocolo HTTPS es esencial para garantizar la seguridad y privacidad de los visitantes. Además, Google considera el uso de HTTPS como un factor de clasificación en los resultados de búsqueda.
Es importante implementar un certificado SSL y redirigir el tráfico de HTTP a HTTPS para proteger los datos transmitidos y generar confianza en los usuarios.
Hoy en día, es fundamental que el diseño web se adapte y visualice correctamente en diferentes dispositivos y tamaños de pantalla, como computadoras de escritorio, tablets y teléfonos móviles para proporcionar una experiencia de usuario óptima y consistente a los usuarios.
Es recomendable seguir las mejores prácticas, como utilizar CSS media queries para adaptar los estilos según el tamaño de la pantalla, optimizar las imágenes para diferentes resoluciones y utilizar un diseño flexible y fluido, en lugar de fijar elementos en píxeles absolutos.
De acuerdo con W3Techs, el 72% de los sitios web en Internet utilizan un diseño web responsivo y no puedes pensar en tener una página web sin considerar este aspecto debido a que brinda:
Si estás pensando en diseñar una página web, debes tener en cuenta varios aspectos: ¿cuál es tu propuesta de valor?, ¿cómo presentarás tu producto o servicios?, ¿cómo quieres que sea la estructura de tu página?, ¿qué colores, tipografías e imágenes vas a utilizar?, ¿cómo vas a organizar el contenido?, etc.
Un diseñador web se encarga de crear el aspecto visual, desde la estructura hasta el contenido. Su tarea es crear un diseño que se ajuste a las necesidades de tu empresa y que sea atractivo y fácil de usar para los usuarios.
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