Marketing de contenidos: ¿Cómo hacer una infografía efectiva?

Con el avance de las herramientas tecnológicas el acceso a la información esta cada día más al alcance de nuestras manos. El internet y los medios digitales se han convertido en nuestros proveedores por excelencia. No obstante, el estilo de vida acelerado y la cantidad de opciones que se tienen a disposición complican la síntesis y recepción de la información. Para ello existen diferentes medios que pueden plasmarla de una manera clara y de fácil entendimiento. Una de estas herramientas son las infografías.

Se trata de uno de los muchos instrumentos de comunicación gráfica que permite exponer de forma rápida y concisa información o datos difíciles de entender en un texto (mapas, textos técnicos, estadísticas, gráficas o material educativo); en ella se emplean una combinación de imágenes sintéticas y textos cortos con el propósito de transmitir información de manera visual. Aunado a esto, son una óptima herramienta de publicidad ya que los sitios con imágenes generan una mayor cantidad de interacción con los usuarios, además de mejorar su posicionamiento en la red.

• Delimitación: determina el objetivo para plasmar solo los datos primordiales y complejos. Contempla el uso de un formato de tres partes: una introducción con información de fondo, el mensaje fundamental y una conclusión o Call to Action.
  
  
• Simplicidad: uno de los errores más comunes es saturarla, no solo de texto sino también de imágenes, lo que la hace poco legible al final. Un diseño sobrecargado distrae al usuario del mensaje principal.
  
  
• Diseño: elige una línea de diseño. Elabora un primer borrador completo, incluyendo todas las visualizaciones pertinentes, ilustraciones y texto, para luego perfeccionarlo en función de las necesidades requeridas. Un conjunto de datos se puede visualizar de muchas maneras diferentes a fin de encontrar la ideal.
  
  
• Narración visual: los elementos que la componen deben permitir captar el sentido general en pocos segundos. El texto debe ser lo más reducido posible.
  
  
• Fiabilidad: para generar confianza al usuario, pueden apoyarse en datos conseguidos a partir de fuentes fiables, que deben ser incluidas al pie de la misma. 
  
  
• Concluir: dar una conclusión al tema contribuye a dar un sentido claro a la infografía.

Por último, realizar una infografía no es solo decorar datos e información. Si bien esto es útil en un afán de ser diferentes y menos solemnes, cualquier decoración innecesaria solo puede contribuir a volver confusa aquella información que el lector busca entender de la manera más sencilla.

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